ONLINE COMMUNITIES: LA COMUNIDAD POSIBLE
Hace poco, un grupo de políticos planearon un golpe de estado. Esto puso en alerta a toda la ciudadanía el cual, por medio de convocatorias lanzadas en las redes sociales, se reunieron en diversos puntos importantes del país para oponerse a dicha acción inconstitucional. Sin embargo, un pequeño grupo ingresó al Congreso y lo incineró, provocando una revuelta el cual se enfrentaron policías y manifestantes. El resultado fueron varias personas encarceladas (aún cuando no eran partícipes de la manifestación), decenas de heridos y un muerto. Y ante la falta de ética y moral por parte de las policías y la falta de pronunciamiento de las autoridades ante los actos atroces que ocurrieron en pocos días, se generaron campañas difundidas por las redes sociales y diversas manifestaciones pacíficas con el objetivo de reclamar el golpe parlamentario.
La rápida acción de la ciudadanía más la forma en que difundió la noticia es gracias a las interacciones de las redes sociales y las comunidades online. Las mismas se manifiestan por medio de acciones o hashtags que publican los internautas para manifestar su repudio contra el gobierno. Paralelamente también surgieron otros movimientos, los cuales por medio de perfiles y noticias falsas, también crean llamados a las acciones y conformación de comunidades online que estén a favor del gobierno, exaltando los «logros” del presidente y justificando sus recientes acciones.
Con esto, quiero resaltar lo dicho por José Luis Brea, autor del libro «El tercer umbral”. Él trató sobre las comunidades existentes en la actualidad y, para el autor, la ley de los nuevo media es la ley del tiempo real: las comunidades online son las que promueven la elaboración de nuevas políticas y fórmulas de resistencia contra la autoridad. Sin embargo, y como lo señalé en el párrafo anterior, también existe un interés por controlar este medio. Actualmente, la mayoría de los medios de comunicación están siendo controlados por las corporaciones y empresas formadas por la sociedad capitalista. La televisión, los medios de prensa, las radios, los periódicos, todas esas industrias son controladas por personas con ciertos cargos políticos, los cuales contribuyen al flujo de la información que sirven como anestesia social, es decir, si existe algún problema o surge alguna movilización, lo opacan como una noticia de «poco interés” ocultándola con publicidades y otras noticias. Por lo tanto, las personas optan por el internet como medio para informarse de la realidad del país. Publican la noticia, la discuten, la difunden y más.
Sin embargo, también están los que tergiversan la información y empiezan a difundir noticias falsas sobre el caso. El internet está en manos de muchas personas. Hoy en día es fácil acceder a él a través de los aparatos móviles. Su facilidad de uso requiere de cierto control. Y si a alguien se le ocurre, puede generar una falsa noticia que solo genere confusiones y dudas al respecto. A pesar de todo, con lo ocurrido en el país y con la movilización de la gente, espero que surja un despertar de conciencia y, poco a poco, las personas cuestionen sobre lo que ocurre en el gobierno, se movilicen y realicen un cambio verdadero tanto en lo político como en lo social.
Marisol Fernández